Eficiencia Energética: Solución y ahorro para la construcción

Vivir en una casa o edificio, o trabajar en un lugar que sea eficiente energéticamente, es un plus del cual muy pocos se pueden jactar en el país. Utilizar bien la energía es algo que en Chile recién se está comenzado a realizar y concientizar entre los usuarios, al mismo tiempo que la preocupación por parte de las autoridades, profesionales y público en general, cada día se está haciendo sentir en todos los ámbitos de la nación, entre quienes quieren dejar un planeta saludable para las futuras generaciones y quienes buscan ahorro en la generación y consumo de energía.

El término de eficiencia energética desde hace varios años se ha puesto en la palestra y es bandera de lucha de miles de personas que intentan dar un respiro al planeta, al minimizar el uso global de energías no renovables que producen elementos contaminantes, de esa manera, tener un mundo más eficiente y sustentable en las nuevas construcciones que se levantan cada día.
El problema es que la polución proviene principalmente desde las casas, edificios, grandes instalaciones industriales, medios de transportes y en todas las labores que requieran del uso de energía. Pero desde hace un tiempo esto ha ido cambiando; el desarrollo y uso de nuevas fuentes energéticas que sean limpias, eficaces y que además ahorren, ha abierto un mercado que recién comienza a nacer en nuestro país concientizando a miles de personas.

Pero qué es la eficiencia energética. Las respuestas pueden ser infinitas al respecto, pero el Programa País de Eficiencia Energética (PPEE) dependiente de la Comisión Nacional de Energía (CNE) lo definió de la siguiente manera: “La Eficiencia Energética (EE) es el conjunto de acciones que permiten optimizar la relación entre la cantidad de energía consumida y los productos y servicios finales obtenidos. Esto se puede lograr a través de la implementación de diversas medidas e inversiones a nivel tecnológico, de gestión y de hábitos culturales en la comunidad”. De esa forma y bajo el alero de lo mencionado, el organismo entrega y plantea propuestas y reformas sobre la Eficiencia Energética en toda la nación.

Programa País de Eficiencia Energética

El Programa País de Eficiencia Energética, ha desarrollado distintos proyectos y propuestas relacionadas con vivienda y construcción que son parte de la iniciativa “Vive con Buena Energía”.

Andrés Romero, director del programa señala que “entre las ideas entregadas y desarrolladas destacan el reacondicionamiento térmico de 10.000 viviendas, la cual es una iniciativa que consiste en un subsidio que se entrega a través del Programa de Protección al Patrimonio Familiar del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu). Durante el período 2009-2010 se entregarán 10.000 subsidios en las regiones de O’Higgins, Maule, La Araucanía, Los Ríos, Los Lagos y en Caleta Tortel. Además, este proyecto incluye el análisis y evaluación de los resultados”.

También se incluye el Programa Piloto de Subsidio Incremental en Eficiencia Energética, el cual consiste en que la CNE, transfiere los recursos al MINVU para mejorar el estándar de comportamiento térmico, más allá de los mínimos exigidos en la reglamentación, en 400 viviendas sociales que se construyan a través del Fondo Solidario de Vivienda.

De las propuestas ya entregadas y puestas en marcha por el PPEE, las que se han llevado a cabo además del área de vivienda y construcción, son las de acondicionamiento térmico, el plan piloto en la comuna de Lo Espejo y el software de certificación del comportamiento térmico de edificios de Chile, incluyendo otras iniciativas que están en proceso de diseño y de las cuales se espera poner en marcha durante el segundo semestre de este año. También está el recambio tecnológico y el plan Ilumínate con Buena Energía, el cual desde el año 2008 se encuentra en funcionamiento.

Como todo plan de acción que se deba promover, el PPEE ha iniciado acciones para fomentar el uso y la optimización de la energía en todos los ámbitos, desde oficinas públicas hasta el incentivo en las construcciones privadas. Al respecto, el director del PPEE Andrés Romero indicó que “Chile es uno de los primeros países de Latinoamérica que ha establecido normas y reglamentos obligatorios para fomentar el buen uso de la energía en materia de vivienda. En esta línea, el Gobierno se planteó como desafío elevar los estándares de aislación térmica de las edificaciones, con el objetivo de lograr un mayor confort, una mejor habitabilidad, alargar la vida útil y reducir el consumo de energía en las distintas construcciones. En este sentido, la reglamentación térmica vigente en el país alcanza a todo tipo de vivienda en Chile, sea social o no”.

Precisamente y dando el ejemplo sobre la optimización, eficiencia y ahorro energético, el Programa País Eficiencia Energética, inauguró nuevas oficinas en el centro de Santiago, que cuentan con un diseño totalmente eficiente, permitiendo generar un ahorro cercano al 40 % anual del consumo de la electricidad, en comparación a oficinas tradicionales.

Al mismo tiempo, el PPEE ha entregado un continuo apoyo para la realización de nuevas leyes que fomenten el uso eficiente de la energía. En la actualidad, en el parlamento se están discutiendo dos leyes relacionadas. La creación del Ministerio de Energía, el cual entre sus facultades contemplaría el establecimiento de normas y el de estándares mínimos de eficiencia energética para la creación de una nueva institucionalidad en EE.

El uso de productos de bajo consumo energético

Desde que se iniciaron los programas y planes de eficiencia energética en Chile, muchas instituciones públicas y privadas han entregado sus aportes con ideas, estudios y mejoramiento de los productos.

Una institución que ha centrado de lleno al mundo de la eficiencia y ha dado a conocer sus ideas es el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), quien ha realizado estudios de ahorro de energía y ha entregado prácticos consejos señalando cuáles son los lugares del hogar y oficinas que generan un mayor gasto de electricidad. Los artefactos que utilizan mayor energía en las oficinas, son el computador, los sistemas de aire acondicionado y el alto gasto en luz. En el hogar se puede encontrar el horno eléctrico, el refrigerador, el lavavajillas, la lavadora, el hervidor de agua, entre otros.

El Seranc también ha entregado otros consejos, como el uso de la luz natural el mayor tiempo posible, de esa manera minimizar el uso de electricidad, además de fomentar la utilización de las ampolletas eficientes.



El futuro de la arquitectura eficiente y sustentable

El año 2008, el tema principal de la Bienal de Arquitectura de Chile fue “Hacia una Arquitectura que cuide nuestra Tierra”, haciendo referencia a la eficiencia energética. En la oportunidad se realizaron charlas y seminarios, encuentros y exposiciones con destacados arquitectos para promover el uso de materiales sustentables y el diseño y construcción de casas y edificios eficientes. Centenares fueron las obras que participaron con grandes construcciones eficientes, entre las que destacaron el edificio de ENAP en Punta Arenas y el de Cristalerías Chile en LLay LLay en la categoría profesional. Pero quienes sacaron mayores aplausos y asombro fueron los estudiantes que participaron de la Muestra Universitaria, con ingeniosos y creativos diseños eficientes y sustentables.

El destacado arquitecto y académico Javier Del Río, hace un análisis sobre la eficiencia energética en Chile y cómo se está enseñando a los futuros profesionales, con las modificaciones en las mallas curriculares, especializaciones, proyectos de títulos y tesis, además de diplomados, post grados y magíster, los cuales han tenido una gran convocatoria y aceptación.

“En la actualidad estoy a cargo del Magíster en Arquitectura Sostenible de la Escuela de Arquitectura de la Universidad Andrés Bello, en el cual nos toca preparar a los futuros profesionales. Con la realización del magíster me he podido dar cuenta que muchos jóvenes y adultos están entusiasmados con el tema, y a su vez varios los que no están relacionados y/o familiarizados con el tema, ya que falta mayor difusión por parte de las autoridades responsables de los proyectos que se llevan a cabo, que por lo demás me parecen bastante interesantes y positivos”, indica el arquitecto Del Río.

Al mismo tiempo recalca que “no debemos esperar que el Estado se haga cargo y entregue las pautas de eficiencia, nosotros, el público en general debemos tomar conciencia del ahorro y evitar el derroche de energía, ya que en este país y en muchos otros, la energía es medianamente económica y si tuviera un mayor costo la valorizaríamos más y reduciríamos su uso”.

Sobre la construcciones sustentables en Chile, el académico precisó que “aún estamos un poco lejos de lo que podríamos realizar, ya que no le sacamos el mayor provecho a los diseños ni al uso de nuevas tecnologías para la calefacción y mantención del calor en las casas, porque hay muchas personas que creen que esto es costoso, y al contrario, tal vez al inicio eleve los costos, pero el ahorro en el futuro es bastante”.

Javier Del Río ha señalado que el uso de materiales eficientes siempre es provechoso, ya que se incentiva la utilización de productos que generen menores consumos de energía, pero al respecto igual tiene algunos reparos, “prefiero un muro de concreto grueso y que me brinde durabilidad, en desmedro de productos que hayan sido creados en forma eficientes pero que tengan menor durabilidad, porque eso se traducirá en que deberemos trabajar el doble para reponer los materiales nuevamente”, puntualizó.

El arquitecto reconoce que en Chile hay un gran interés por parte de la gente y están tomado conciencia sobre el cambio climático, el efecto invernadero, la crisis energética y todo lo relacionado con la eficiencia y sustentabilidad, pero finaliza señalando que nos falta capacidad de autogestión e incentivo propio para llevar a cabo los planes y proyectos.

Chile y las construcciones sustentables

En la actualidad, Chile cuenta con varias instalaciones y edificios que son energéticamente eficientes, entre los cuales se encuentra el edificio Bioclimático de ENAP de Punta Arenas, que con un diseño vanguardista, consiste en una estructura de tres pisos construida en el interior de un invernadero, que durante la temporada de invierno condensa la sensación térmica que provocan los vientos de la zona, creando un ambiente que permite aumentar la temperatura del aire, ahorrando cerca de un 70% de energía.

Otro que aún está en construcción y se ha convertido en el emblema de los grandes edificios nacionales es la torre Titanium La Portada. La cual se encuentra en la etapa de postulación para alcanzar el nivel de “precalificación” en la en la categoría LEED (Leadership in Environmental Design), liderazgo en el diseño ambiental y energético, que otorga la United States Green Building Council, que mide entre otros aspectos la ubicación de la obra, el eficiente uso del agua y la calidad del aire en el interior.

Cristalerías Chile también instaló una fábrica con características bioclimáticas y sustentables, la cual utiliza sistemas de ventilación natural Venturi, que aprovecha el viento para extraer desde la fábrica el aire caliente que se produce, manteniendo una temperatura estable en las oficinas.Además, cuenta con un anillo verde alrededor de las instalaciones destinadas a la protección del medio ambiente, lo que resguarda de posibles derrames tóxicos en el lugar, y al mismo tiempo otorga una mayor armonía al paisaje del sector.

Energía para todos

El mundo ha sabido materializar, utilizar y controlar los diferentes estados de las energías que se encuentran disponibles en el planeta, de esa forma el abanico de energías renovables y no renovables es amplio.Entre los no renovables, los que tienen una mayor popularidad son los fósiles como el diésel y sus derivados. El carbón es otro elemento que se extrae desde los confines de la tierra, que es económicamente viable y produce gran cantidad de energía. El problema con estos dos productos es la alta contaminación que provocan al ser combustionados, porque las partículas que lanzan alaire son altamente tóxicas para los seres vivos. Sin embargo, existen numerosas fuentes de energía más limpias y amigables. La más común y utilizada es la hídrica, que se produce por el movimiento del agua generando electricidad.La electricidad es una fuente limpia, el problema es que para poder producirla hay que construir grandes represas, centrales y sistemas interconectados para realizar su traslado, pero que todo puede quedar en nada si las sequías afectan las zonas donde se encuentran construidas, situaciones que ha vivido Chile en varias ocasiones.

En comparación a otros países, Chile aún se encuentra en pañales para la producción y uso de energías alternativas. Pero el último tiempo, muchas empresas se han interesado en la generación de nuevas fuentes y la eólica y solar se han convertido en las estrellas del espectáculo.

La energía eólica se basa en el movimiento del viento. El proceso se realiza a través de generadores eólicos (remolinos), que transforman la fuerza del movimiento de las aspas que a su vez transmiten su potencia hacia las turbinas, lo que provoca que el generador produzca electricidad. A pesar que estas formas de energías son costosas, sus procesos son limpios, y Chile cuenta con grandes espacios para la creación de campos eólicos.

Otra fuente de energía que ha tomado gran impulso y que actualmente se utiliza en casas y edificios, es la energía solar producida por paneles.

La radiación solar que recibe la tierra diariamente podría ser suficiente para generar energía a toda la población mundial durante un año. Lo más importante es que la energía obtenida del sol es gratis e inofensiva para el medio ambiente.
La ventaja de Chile es que a lo largo de su territorio se podría instalar numerosas centrales de solares, las cuales por cada metro cuadrado de radiación produciría cerca de 2200 kilowatt-hora de energía al año, lo que se traduce en 200 litros de combustibles ó 250 m3 de gas natural.

Energía Nuclear, el poder que nadie quiere

Debido a los negativos usos que se la ha dado, la energía Nuclear no cuenta con el favor y la gracia de muchos, sin embargo, países como Francia han demostrado que la producción y utilización adecuada y controlada de ésta puede abastecer a gran parte del territorio nacional.

Si bien en un comienzo construir una central nuclear es algo costoso para cualquier país, al final el costo de la inversión se puede recuperar en pocos años, ya que la producción de energía sería más barata y eficaz que otras. En la actualidad, recién se están tomando las medidas correspondientes para realizar los estudios de factibilidad de contar con una central nuclear, pero ya han salido voces que indican que se opondrán a la construcción de una de éstas.
Por ahora, sólo falta esperar que el procedimiento de análisis se lleve a cabo y aguardar a que la siguiente administración gubernamental se exprese al respecto.

Eficiencia chilena

Los diferentes programas que se encuentran desarrollando el PPEE, acercan en gran medida a nuestro país a las potencias mundiales en el fomento y utilización de construcciones eficientes y sustentables.

En comparación a otros países, Andrés Romero, director del PPEE señala que “los procesos de implementación de una política de eficiencia energética en edificaciones de países como Alemania, España, EEUU, Brasil, coinciden con el trabajo que estamos realizando en el país, en relación a la implementación de cinco elementos fundamentales, siendo estos: contar con una regulación que obliga una condición base; un sistema oficial de cálculo energético; un mecanismo de regulación de las instalaciones térmicas de edificios y un sistema de información objetiva de aplicación obligatoria o voluntaria (certificación y etiquetado) y una estrategia activa de educación al usuario”.

“Asimismo, existen diferentes sistemas de certificación, ambientales y energéticas. Las primeras intentan evaluar el desempeño global del edificio, mientras que la segunda se concentra específicamente en el uso de la energía en todas sus aplicaciones”, agrega Romero.

Al mismo tiempo, el sector privado chileno está incentivando el uso y la certificación de los procesos ambientales en las nuevas obras que se encumbran diariamente.

Por su parte el Gobierno, a través del Ministerio de Vivienda y Urbanismo y la Comisión Nacional de Energía, están en proceso de aprobar y oficializar el sistema de certificación energética para las viviendas nuevas, abarcando las demandas de calefacción, iluminación y agua caliente sanitaria.
El director del Programa País Eficiencia Energética precisa que “aún queda mucho por hacer, aunque hemos realizado grandes avances, las construcciones residenciales deben ir superando los estándares vigentes, se debe lanzar oficialmente el método de cálculo CCTE v2 y oficializar el sistema de certificación de vivienda. Con estos adelantos lograremos que el consumidor tenga mayor información a la hora de comprar una nueva vivienda”.

“Sin embargo, todos los procesos que se están llevando a cabo son parte de una serie de acciones que apuntan para continuar con políticas de eficiencia energética en edificaciones, y de esa manera elevar los estándares, no sólo de viviendas, sino de otras construcciones de carácter público y privado”.